Seguro que conoces qué es la Genética a grandes rasgos. Incluso quizá sabes cómo esta puede influir en numerosos aspectos de nuestra vida. Sin embargo, quizá no sabes que tan solo el 10% de nuestros genes se encuentra en un «estado activo». De ello, y de mucho más, queremos hablarte en este post. ¿Te animas a conocer qué es la Epigenética y cómo nos servimos de los estudios epigenéticos para ofrecerte los mejores resultados posibles? ¡Quédate!
De momento y para ir abriendo boca, sólo te contaremos que la Epigenética es aquello que nos ofrece información personal y fiable de cada uno de nuestros clientes, de tal forma que los tratamientos nutricionales puedan ser completamente personalizados y, por lo tanto, más efectivos. ¡Sigue leyendo para descubrir todos los detalles!
Un poco de historia sobre la Epigenética
Sobre el año 2000, un proyecto financiado por gobiernos de grandes potencias mundiales se centró en descubrir e investigar acerca del genoma humano. De este proyecto se obtienen numerosas conclusiones. Entre ellas, una de las más impactantes es que el ser humano está formado por unos 25.000 genes. Y decimos impactante no porque la cantidad sea elevada sino todo lo contrario. ¿Sabes que un grano de arroz tiene hasta 50.000 genes? ¿Cómo es posible que una persona solo tenga 25.000? ¡Increíble! Tanto es así que los investigadores repiten sus estudios una y otra vez, llegando incluso a obtener cifras menores. ¿Cómo es esto posible?
La respuesta podemos encontrarla en que, aunque nuestros antepasados nos dejan algunos de sus genes, muchos de ellos se encuentran en un estado de «adormecimiento». Ejemplo de ello son los numerosos estudios que apuntan a que algunos tipos de cánceres ya se encuentran «viviendo» en el cuerpo de las personas. Sin embargo, los genes que lo conforman pueden despertar, haciendo proliferar el cáncer, o quedarse adormilados para siempre. ¡En este artículo puedes leer, de hecho, sobre el descubrimiento de un fármaco contra el gen que provoca el cáncer de colon!
El 90% de la genética que nosotros poseemos está «dormida». ¡Sólo nos llega un 10% de la genética de nuestros antepasados!
La alimentación, clave en nuestra genética
Como decimos, ese 90% restante que se encuentra «adormilado» variará o no dependiendo de nuestros hábitos y nuestra forma de vida. El estrés, por ejemplo, puede ayudar a despertar algunos de esos genes negativos que pueden encontrarse dormidos. Lo mismo ocurre con nuestra alimentación. Una alimentación saludable favorecerá una genética también saludable.
Así, la ciencia que estudia todo esto es lo que conocemos como EPIGENÉTICA. «Epi» proviene del griego, «sobre», y el término genética: Sobre la genética.
Cuando hacemos un estudio genético, nos basamos en pruebas de un marcador genético muy potente, como es el cabello de una persona. Pero de una parte muy concreta, debe ser pelo que crezca desde el cuello hacia arriba. La zona occipital nuestro cerebro es donde se ubica una parte muy importante de este marcador biológico. Por eso, extraemos un cabello con bulbo, que es la zona viva, y con ese marcador genético somos capaces de realizar estudios en profundidad sobre la genética del paciente. En concreto, lo hacemos gracias a una inmensa base de datos perteneciente a un laboratorio alemán, en Hamburgo. En este sentido, haciendo un escaneado con radiofrecuencia cuántica, se pasa esta bioinformación al laboratorio.
Cuando nos devuelven el informe, nos ofrecen información sobre cuatro soportes básicos:
- Soporte metabólico.
- Soporte inmunitario.
- Sistema intestinal.
- Sistema circulatorio.
Con todos estos soportes básicos, somos capaces de conocer aspectos tan importantes como la presencia de hongos o de virus en el organismo del paciente. También nos arrojará información sobre si debemos trabajar en el sistema hormonal, sistema de proteínas de nuestro cuerpo, etc. ¡Incluso conoceremos hasta diez alimentos que debemos evitar! Estos no son alimentos que nos provoquen alergias o intolerancias; sino que son alimentos que, al ser consumidos y metabolizados, bloquean enzimáticamente a otros nutrientes.
A partir de estos resultados, comienza nuestro trabajo. ¿Sabes eso que se dice de que «somos lo que comemos»? Pues, aunque en parte es cierto, en otra parte, no lo es… Es fundamental saber cómo se encuentra nuestro cuerpo para descubrir si, realmente, aquello que comemos nos nutre realmente. ¡Esto es primordial para lograr los objetivos que queremos conseguir!
Existe una relación estrechísima entre nuestro intestino, nuestro sistema inmunitario y nuestro cerebro. Así que…
¡SOMOS AQUELLO QUE ABSORBEMOS!
¿Cómo utilizamos el estudio epigenético en Nutrigen Saití?
Ya conoces qué es la Epigenética y en qué consiste un estudio epigenético, ¿verdad? Pues bien, es el momento de conocer cómo utilizamos este estudio en NUTRIGEN SAITÍ. ¡Vamos!
Básicamente, a nosotros, el estudio epigenético nos ayuda a orientarnos y a orientar nuestro tratamiento. No somos médicos, por eso, no podemos diagnosticar ni tratar. Sin embargo, desde el conocimiento, sí podemos adaptar tu alimentación al estado de tu organismo para lograr los objetivos deseados. Además, al estudio epigenético se le suma nuestra primera valoración inicial (gratuita) que realizamos a todos nuestros pacientes. Incluso, en muchas ocasiones, si el paciente lo que desea, nos gusta solicitar analíticas. Con todo ello, podemos contrastar información y tener un conocimiento 100% real del estado del organismo de nuestros pacientes. ¡A mayor conocimiento, mejores resultados! Es simple, ¿verdad? 🙂
Así, somos capaces de reequilibrar nuestro organismo, tanto interiormente, como exteriormente o estéticamente. ¡Todo en uno, esto es METADETOX!
